La Voluntad de Dios para mí es Perfecta Felicidad
- Iciar Piera
- hace 2 días
- 2 Min. de lectura
Durante mucho tiempo asociamos la Voluntad de Dios con sacrificio, con renuncia, con tener que aceptar lo que “nos toca”. Pero Jesús nos invita hoy a recordar algo completamente distinto:
La Voluntad de Dios no es que sufras, sino que seas feliz.
La Voluntad de Dios es dicha, plenitud, descanso. No es algo que venga después, cuando hayas aprendido lo suficiente o corregido tus errores, sino es lo que ya es verdad ahora mismo.
Tu felicidad no depende de que cambien las circunstancias, sino de que dejes de oponerte a lo que ya se te ha dado.
Cuando te unes a Su Voluntad, no pierdes nada. Al contrario, dejas de sostener el esfuerzo de tu propia voluntad —esa que cree saber lo que necesita— y te abres al fluir amoroso de una guía que solo quiere tu bien.
A veces pensamos: “Si suelto el control, ¿qué será de mí?”
Y Jesús sonríe, como quien acaricia a un niño asustado, y susurra: “Será todo más fácil. Más ligero. Más feliz.”
La voluntad de Dios no te exige nada. Te libera de todo.
Porque Su Voluntad y la tuya son una sola —solo que lo habías olvidado.
Hoy puedes descansar en esa certeza:
no hay castigo en el plan de Dios, no hay pérdida ni lucha, solo un Amor inmenso que te dice:
“Mi Voluntad para ti es perfecta felicidad.”
🌸
Puedes detenerte un instante, cerrar los ojos y repetir suavemente:
“La Voluntad de Dios para mí es perfecta felicidad. Y esa es también mi voluntad.”
Y deja que esa frase haga su trabajo silencioso: abrir espacio dentro de ti para recordar que el Cielo no está lejos… está justo aquí, donde eliges rendirte a la alegría. 🌿
Feliz día.
Iciar
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