top of page

Soy espíritu

  • Foto del escritor: Iciar Piera
    Iciar Piera
  • hace 9 horas
  • 2 Min. de lectura

Hoy recordamos lo que somos.


Más allá del cuerpo, más allá de la historia, más allá de las emociones que van y vienen…


Soy espíritu.


Estas tres palabras contienen una verdad tan simple, tan pura, que la mente no puede comprenderla, solo el corazón puede reconocerla.


Soy espíritu: libre, ilimitado, inocente.


No nací y no moriré. No estoy atrapado en la forma. Estoy aquí, pero no soy de aquí.


Nos hemos creído que somos un cuerpo: un nombre, un pasado, una biografía que proteger.


Nos hemos definido por lo que hacemos, por lo que otros piensan, por lo que cambia.


Pero el cuerpo es solo un instrumento, un medio que el espíritu usa para comunicarse, para extender amor.


El cuerpo no puede contener lo que realmente somos.


Cuando recuerdo que soy espíritu, todo se vuelve más liviano.


No tengo que defenderme, ni justificarme, ni esforzarme tanto por ser “alguien”.


El espíritu no necesita nada.


El espíritu descansa, confía, observa con ternura todo lo que ocurre.


Jesús nos enseña en Un Curso de Milagros que el espíritu es la parte de la mente que aún está en comunicación con Dios.


Es el lugar dentro de ti que nunca ha sido dañado, nunca ha tenido miedo, nunca ha dejado de amar.


Ese espacio sigue intacto, esperando a que vuelvas a él.


Cada vez que eliges perdonar, recordar la inocencia, mirar con amor en lugar de juicio, estás regresando a tu identidad verdadera.


Estás recordando: “Soy espíritu.”


Y desde ahí, todo cobra sentido.


Hoy, deja que esta frase te acompañe suavemente a lo largo del día.


No como una afirmación que repetir con esfuerzo, sino como un susurro que te recuerda quién eres realmente.


Cuando sientas miedo, di: “Soy espíritu.”


Cuando algo duela, di: “Soy espíritu.”


Cuando te olvides de tu paz, di: “Soy espíritu.”


Y poco a poco, verás cómo el mundo pierde peso, cómo todo se vuelve más liviano, más amable, más silencioso.


Eres espíritu: eterno, libre, inocente, amado.


Nada real puede ser amenazado.

Nada irreal existe.

En esto… radica la paz de Dios. 🌿


Feliz día.

Iciar

Comentarios


Publicar: Blog2 Post

Formulario de suscripción

¡Gracias por tu mensaje!

©2021 por followyourbliss. Creada con Wix.com

bottom of page