Intimidad

El Curso es una ilusión.

El libro azul tan venerado por los estudiantes del Curso es ilusorio.

Es parte de la ilusión.

Lo importante del Curso no son las palabras o los conceptos que en él se expresan.

Lo importante es el Amor que lo inspiró.

Es una obra "inspirada".

Su propósito es perdonar nuestras defensas a ese Amor.

Recordar ese Amor hasta fundirnos con Él.

Dicen que Kenneth Wapnick (KW), una de las personas que mejor entendía y enseñaba los postulados del Curso, se iluminó no gracias al Curso, sino a la obra de Beethoven.

Relata KW que esa música se convirtió en lo más importante de su vida. Estaba dispuesto a crear una intimidad con esa música. Hacerse uno con ella.

Para él la música de Beethoven no era de este mundo.

La escuchaba una y otra vez.

Durante años observó que había algo que le impedía esa intimidad, y que no tenía nada que ver con la música, el que tenía que cambiar era él.

Al final esa unión se produjo, lo que le ayudó posteriormente a crear esa misma intimidad con el Curso y con los escribas del mismo.

Las palabras y los conceptos no sanan. Es el Amor el que sana.

Eso es lo importante.

Ese Amor.

Ya se trate de una relación con una persona, o un objeto, el propósito es dejar ir el ego, hasta que esa unión se produzca.

Hasta que no haya nada entre nosotros y ese Amor.

Las relaciones son un medio para ir purificando nuestra mente porque nos muestran dónde estamos eligiendo el miedo en lugar del amor.

Ya se trate de la relación con tu pareja, tu hijo, tu jefe, o con cualquier otro símbolo, como el Curso, su propósito es llegar a esa intimidad con el Amor.

En el caso del Curso, sería por ejemplo con Jesús, como un símbolo de ese Amor que no es de este mundo.

Es el Amor lo que queremos del Curso no sus palabras o su brillante sistema de pensamiento.

Es a esa unión a lo que aspiramos.

A hacernos uno con el Amor que inspiró este Curso.

Feliz día.

Iciar