Navegar la incertidumbre
- Iciar Piera
- 27 feb
- 4 Min. de lectura
Hay una práctica que ya he compartido en este blog que son las "Cartas desde el Amor" (Letters from Love) de Elizabeth Gilbert.
Es una herramienta de "journaling" donde te sientas con tu libreta, te aquietas y conectas con esa Presencia Amorosa que no tiene nombre, y siempre está dispuesta a acudir en nuestra ayuda.
Elizabeth plantea la pregunta:
Dear Love, What would you have me know today?
Querido Amor, ¿Qué quieres que sepa hoy?
Pero también puedes preguntar por algo especifico. Algo que te preocupe, o alguna situación sobre la que necesites una nueva perspectiva o claridad.
En mi caso este año 2025 empezó con una energía de "hibernación".
El mes de enero me lo pasé descansando, durmiendo, leyendo y paseando mayormente.
Y con una energía de incertidumbre, como si hubiera un gran interrogante en mi mente.
¿Qué camino seguir si lo que estaba haciendo hasta ahora estaba perdiendo fuelle y ya no sentía el impulso de continuar con ello?
Era como si la inspiración me hubiese abandonado.
Hay momentos para la inspiración, para la creación. Momentos para la expansión, donde está presente una energía que te empuja, te levanta del asiento, te pone en movimiento.
Y hay momento donde todo eso se diluye, como si hubiesen apagado la batería y las fuerzas te abandonan.
Esos momentos son para descansar.
Dicen los astrólogos que eso es debido a Piscis, y a los transitos de este comienzo de año.
No se si será eso, pero el caso es que son momentos difíciles de transitar porque nos exigen que soltemos el control y que nos abandonemos al flujo y los tiempos del Universo.
Entonces decidí poner en práctica el formato de Elizabeth y pedir guía:
Querido Amor, ¿Qué puedes decirme acerca de la incertidumbre? ¿Cómo puedo transitar estos momentos en los que parece que nada está claro? ¿En los que no hay impulso o dirección?
Esta es la respuesta:
La incertidumbre esconde un gran regalo aunque solo los valientes, los que están dispuestos a atreverse a surcar esos mares tendrán la oportunidad de recibirlo.
La incertidumbre te pone en una situación de humildad, donde la confianza se afianza porque todo lo demás, lo que hasta entonces nos funcionaba, ya no lo hace.
Entonces tenemos que aprender a navegar un nuevo espacio.
La incertidumbre nos prepara para algo nuevo. Es el espacio que se encuentra entre un ciclo y el siguiente. Algo ha llegado a su final, y algo está preparado para emerger.
Pero al igual que el feto precisa de 9 meses, en ocasiones nuestra mente necesita prepararse para lo que está por nacer.
Esos espacios liminales son tan necesarios como aquellos de ferviente actividad, o creatividad.
Es el momento de enfocarse en el silencio, de Ser. De permitirse, ahora más que nunca, ser guiado. De estar en paz con el "no saber".
Porque hay algo más Grande que ahora lleva el control. Algo que sabe lo que es más beneficioso para nosotros, y para todos.
Es el momento de echar raíces, de estar presentes. De trabajar la fortaleza interior.
La incertidumbre solo es difícil para el ego, porque es un espacio en donde el ego deja de recibir alimento. Donde tu atención está en lo que nunca te fallará.
Son tiempos de introspección. De descanso. Tiempos para relajarse, jugar, divertirse. Para permitirnos volver a ser como niños confiados que no necesitan saber qué es lo siguiente.
Porque puede haber mucha diversión, y juego, en ese "no saber". Los niños saben muy bien como manejarse en ese espacio, ellos no planifican, no están preocupados por el pasado, o por el futuro. Viven en el presente.
Confían en la Vida.
En ese estado de "no saber" es donde descasa la dicha, la felicidad, que siempre has estado buscando.
Así que no te preocupes si ahora mismo no sabes qué hacer, si la inspiración y la creatividad parecen haberte abandonado.
Descansa.
Relájate.
Haz todo aquello que te hace sentir bien, que te caliente el corazón.
Deja que tu mente se eleve, enfócate en la Presencia, en el silencio interior. Ese silencio es algo tremendamente rico. Hay una gran alegría ahí.
El silencio del corazón no es algo frío, o aburrido. Te aseguro que no lo es.
Es donde descansa la sonrisa.
Es la sonrisa.
Paz, dicha y felicidad.
Ese es el objetivo ahora. Conectar con ese espacio, dejar que te mueva. Que te sostenga.Te nutra y se expanda.
Puedes transitar este espacio con una gran sonrisa si no quieres que algo sea diferente. Si no te impacientas. Si no quieres empujar el río.
Es tiempo de refugiarte, de permanecer adentro. De pasear, sentir. Respirar.
Y si sientes hacer algo, hazlo.
Porque te aseguro que serás guiado a través de ese espacio, como lo eres siempre.
Esa es mi promesa.
Y resurgirás de las cenizas como el ave fenix.
Conectada a tu verdadero Ser.
Presente.
Feliz.
Despierta.
Confía, mi amor
Yo SIEMPRE estoy contigo.
Te amo ♡.
Y tú, ¿cómo has empezado este año?
Me encantará leerte.
Gracias por acompañarme.
Feliz día.
Iciar
Comments